Palabras de Mercedes Castasegna
Ex docente de Actividades prácticas, jubilada en 1977.
Escuela Drago:
Después de 35 años que me retiré de la escuela, vuelvo a encontrarme con mis ex compañeras de tarea, me emociono al recordar los años pasados en las aulas de la escuela, enseñando lo que estudie, fueron años lindos…. Los niños con su calidez me enseñaron mucho, la tarea de las maestras es noble, muchas satisfacciones se reciben; había que comprenderla, limar asperezas, porque nadie piensa igual por lo tanto se debe respetar y comprender, esa es la misión del maestro, no estudiar para ti sino para los que esperan tus palabras, enseñando con cariño y paciencia es como se logran los propósitos que nos proponemos.
Suelo encontrarme a ex alumnos que saludan con afecto, me alegra y también me emociona, soy sensible, eso que es normal cuando se es una persona mayor, pero hay que saber manejar la mente para que no nos traicione y digamos palabras ofensivas, por lo tanto hay que meditar antes de actuar, si nos proponemos lo logramos.
Me agradaba decorar las paredes de las aulas, el salón de actos, solíamos hacer reuniones, charlas, exposiciones de trabajos; hoy esta cambiada la escuela, el paso del tiempo logró ese cambio, las tareas que ahora se imparten son diferentes a la de los años anteriores, pero siempre fue y será la función del docente loable y constructiva. La lectura y el escribir fue mi fuerte, pero también lo demás lo impartía con cariño; recuerdo a mis compañeras, muchas ya no están, lo mismo alumnos que ya partieron, pero dejaron su amor y dedicación por lo que hacían, tengo guardados escritos de mis compañeras donde me dicen que les enseñe a sus hijos a manejar el lápiz, la aguja, mi misión era actividades prácticas, artesanías y en la etapa de la escuela intermedia, también asistíamos por la tarde, solíamos hacer cursos de capacitación para lograr ampliar los conocimientos.
Recuerdo… todas las mañanas, se cantaba el Himno Nacional y al colocar la Bandera también era toda una ceremonia; habíamos formado un grupo de teatro, también de títeres y marionetas, teníamos la idea de reunir a los niños para que pasen horas en la escuela, donde se les brindaba cariño y comprensión, recuerdo cuando, nos reunimos para despedir a 9 personas que se jubilaban, fue un acto muy emotivo, se eligió la reina de los jubilados y el rey eran muchos alumnos que diariamente llenaban los salones, funcionaba primaria, primaria nocturna por la noche, artesanías y la escuela Nicaragua, Hoy queda solamente la escuela Drago, la nocturna y artesanías, también hay comedor donde sirven desayuno, almuerzo y merienda.
Parece que fue ayer y pasaron muchos años, hace 35 años que me retire, los primeros meses de haberme retirado, no podía ir a la escuela, me emocionaba, pero con voluntad lo superé y hoy entro como antes con seguridad y contenta de poder pasar por las aulas.
Solía traer alumnos a mi casa para ayudarlos en las tareas, mi memoria me permite recordar mucho lo vivido durante los 14 años que pasé en la escuela, mi segunda casa, digo siempre. Gracias a Dios creo haber logrado los propósitos que me propuse.
Gracias por invitarme.
Mercedes